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Pescados, para todos los días

 

Camarón Bubba. La empresa local que se animó a ir contra la corriente, en tierra de carnes diseñó una completa alternativa pensada en el mar. Los Miranda y Alzueta ensamblan un auténtico emprendimiento familiar.

 

 

 

Ariel Miranda, es de Mar del Plata pero hace años que vive en Bolívar, la ciudad natal de su esposa, María Alejandra Alzueta. La decisión de instalarse y elegirlo como lugar de vida estuvo acompañada de la búsqueda de un emprendimiento innovador, algo que no existiera ya en la zona. Como su familia estuvo siempre vinculada al negocio del pescado decidieron comenzar a averiguar cómo se desarrollaba el mismo en Bolívar. Entonces vieron que no había un tipo de rotisería específicamente de pescado y que tampoco existía un circuito regular que mantuviera la frescura del producto. En 2007 Camarón Bubba abrió sus puertas en el local ubicado en Lavalle 474.

 

El inicio

Emprender de manera independiente requiere siempre de la innovación, ofrecer algo nuevo o algo distinto a lo que ya existe podría ser la clave del éxito: “por lo que me contaban, en Bolívar se traía pescado sólo una vez por semana, nosotros empezamos con el fresco, con una cadena de frío y otras precauciones. Además ofrecemos comidas preparadas para aquellas personas que quieren probar algo nuevo, no tienen tiempo para cocinar o no quieren ensuciar la cocina para hacer un filet, por ejemplo”, dice Ariel.

Como si el destino fuera algo que no se puede torcer, Ariel cree que Camarón Bubba iba a llegar a su vida tarde o temprano, “en mi familia hay varias generaciones trabajando con el pescado, yo me dedicaba a otra cosa hasta que empecé también a trabajar en el rubro, aprovechando la experiencia que ya tenía”. Además de esa destreza tuvo que aprender cuestiones implicadas en un comercio independiente. El inicio no fue fácil y hoy ya forma parte de recuerdos: “teníamos un susto bárbaro cuando queríamos arrancar esto que parecía tan raro, como que no encajaba en Bolívar por competir con tantas carnicerías. Pero nos animamos a invertir, no estábamos seguros ni teníamos un resto económico para que nos vaya mal pero nos arriesgamos con mi mujer y lo hicimos”.

Para que el emprendimiento marche bien, la familia Miranda emprendió una de las recetas más difíciles de su vida, y en los ingredientes no podía faltar la parte técnica, sin dejar de lado lo intuitivo: “hay que estudiar el mercado siempre que se va a ofrecer algo nuevo, no abrir improvisando. Hay que mirar qué hay y que no, y luego animarse, siempre hay como una intuición, una corazonada que te dice que te va a ir bien. Hay que animarse a empezar de nuevo y trabajar horas y horas incansablemente”.

Por otra parte, Camarón Bubba es un emprendimiento familiar bastante amplio, “sin las dos familias, de mi mujer y mía, que nos apoyaron desde el principio, no lo podríamos hacer. Acá trabajan familiares de Bolívar y desde Mar del Plata nos envían la mercadería, así que estamos todos relacionados”.

 

Camarón Bubba

La elección del nombre, parte de la historia del emprendimiento, fue importante a la hora de instalarse y promocionarse en Bolívar. “Al principio se iba a llamar Camarón Camarón, después pasó a ser Camarón Loco y luego se nos ocurrió ¿y si le ponemos Bubba? Como el amigo pescador de Forrest Gump, entonces quedó Camarón Bubba. Al principio nos sonaba un poco raro pero en el fondo nos gustaba”, cuenta Ariel.

Camarón Bubba no es la única pescadería en la ciudad, sin embargo su historia puede constituir un ejemplo para nuevos emprendedores. Su propietario le atribuye varias causas a la fidelidad de sus clientes: “creo que nos siguen eligiendo porque garantizamos la frescura, día por medio llega el pescado, aunque a veces viene cuatro veces por semana desde Mar del Plata. Tengo la tranquilidad de que mi tío es mayorista y me elige lo mejor para Camarón Bubba. Pero todos los días estamos rindiendo examen con el cliente, apostando a la mejor relación” además, la inversión en comunicación y diseño es clave en este tipo de vínculo donde se muestran productos nuevos constantemente. Es por esto que en local es común ver carteles nuevos, folletos y demás detalles que hacen a esa comunicación con el cliente, “en realidad me gustaría tener más comunicación y marketing porque entiendo la importancia de la publicidad, desde el jingle que sale en la radio, que casi todo Bolívar conoce, hasta la imagen gráfica y ahora estamos implementando las redes sociales, de a poco, porque lleva tiempo y dedicación” dice Ariel, que tiene vastos conocimientos sobre comunicación y periodismo. El jingle que lo caracterizó en la ciudad forma parte de la historia del emprendimiento familiar “cuando iba a buscar a mi hija al jardín el bicicleta, volvíamos siempre cantando. Un día inventamos el jingle de Camarón Bubba, ella tenía cuatro años y ahora tiene doce”.

 

Equipo de trabajo

Ariel se encarga principalmente de recibir y mantener el pescado fresco, buscar variedad, calidad y precio dependiendo de la temporada. María Alejandra es la encargada de gran parte de la cocina, sus días pasan entre rellenos de empanadas, tartas, cazuelas y escabeches, entre otras delicias. La cocina trabaja por turnos, a la mañana y por la tarde noche, además hay comidas que deben hacerse en el momento como por ejemplo las rabas. El equipo de trabajo cuenta también con una ayudante de cocina y limpieza, parte fundamental del lugar, además de proveedores y demás. Tanto Ariel como María están capacitados formalmente para trabajar con pescado, tal es así que en 2010, por pedido de los clientes, realizaron un curso de sushi con Iwao Komiyama, el mejor cocinero oriental del país. Sobre el sushi dice Ariel, “estamos haciendo jueves, viernes y sábado y todos los fines de semana está agotado en Bolívar, y en el verano hago en Mar del Plata. Tanto mi mujer como yo somos autodidactas, vamos probando con los que nos gusta y le gusta a la gente”.

El equipo de trabajo parece incansable ante tanta demanda y Ariel lo atribuye al amor por el rubro del pescado y la cocina: “es algo que nos gusta, el día que deje de apasionarnos no lo tenemos que hacer más, eso te motiva. Yo sigo comiendo pescado todos los días, además es un emprendimiento familiar, es nuestro y lo seguimos alimentando todos los días”.

 

Amplia oferta

Sólo basta con entrar al local para sorprenderse con la cantidad y variedad de menús que se pueden elegir, “todos los días hacemos cazuelas, paella, el menú de semana santa es lo mismo que se puede encontrar todos los días, pero no hay que olvidar que también tenemos pescado crudo”.

Entre los más elegidos están las rabas y cornalitos, arroces, tartitas, woks, merluza o filet de atún o pez ángel, empanadas, lenguado al roquefort, mostaza, o crema, abadejo a la mostaza, salmón rosado a la plancha, fideos, cazuelas, milanesas, escabeches y ensaladas de mariscos, acompañados de distintas guarniciones.

Además de toda la oferta en pescado crudo y comidas elaboradas, desde Camarón Bubba se ofrece el servicio de catering para eventos. En este sentido se han organizado cenas show, bailes con mucho éxito y a su vez se puede solicitar el servicio para fiestas o eventos particulares.

 

Cocinar para Bolívar

Actualmente el pescado está en boga ya que se considera un alimento saludable. En general, desde el discurso médico se aconseja comer pescado por sus múltiples proteínas y grasas buenas como el Omega 3. “El pescado es recomendado para ayudar a bajar el colesterol, sobre todo los pescados que viven en la profundidad como merluza, lenguado, salmón blanco, o pescados azules como el atún y la caballa”, dice Ariel sobre el cambio en la alimentación que se vive dentro de las familias clientas del local.

Si bien la oferta inicial no se salía demasiado de las propuestas conocidas, la familia de Camarón Bubba esperaba desde un principio poder ampliar la carta de menús. “Nos costó instalarnos los primeros tres o cuatro meses pero una vez que nuestra propuesta fue aceptada empezamos a agregar menús nuevos. Primero trajimos comida asiática, distintos woks, chow fan con verduras y pescado, si bien estaba más de moda con carne de ternera o cerdo, nosotros creamos la opción con pescado”. La primera respuesta fue buena, basada en comidas tradicionales elaboradas con pescado. Tiempo más tarde comenzaron a aparecer en el mostrador del local nuevas alternativas que los clientes se animaron a probar, entonces esto permitió que hoy la oferta de comidas sea enormemente amplia. Ariel comenta “cada cosa que hacemos nueva lo prueban y se lo siguen llevando, la gente de Bolívar es muy curiosa con lo nuevo, eso puede favorecer o perjudicar, pero al ser una ciudad chica nos conocemos productores y clientes personalmente”.

En comidas preparadas a base de pescado, Camarón Bubba es la mejor opción “se come prácticamente lo mismo que en Mar del Plata, muchos nos dicen que les gusta venir y elegir sin tener que hacer cola para esperar su comida. Nos gustaría poner mesas para comer por ejemplo rabas, que deben comerse al instante, pero por ahora, después de tantos pedidos, las hacemos para llevar a domicilio aunque no sea lo mejor”.

Cocinar para el público local parece no ser tarea sencilla pero la familia Miranda está contenta con el resultado: “siempre queremos agradecer a la gente de Bolívar porque realmente cuando emprendimos esto con un producto tan distinto al resto teníamos miedo, agradecemos que la gente se haya animado a probar, a seguir viniendo, hay clientes que vienen dos veces por semana de manera regular”. En base a esto ya hay nuevos planes: “este año queremos agregar otras proteínas, cerdo y pollo para los woks, que son muy pedidos y aunque estos sea una pescadería podemos ampliarnos a lo que le gusta a la gente. En realidad cambiamos todo el tiempo para que el cliente no se canse”.

Tal es el éxito de este emprendimiento que sus productos ya empezaron a expandirse fuera de Bolívar: “ahora tenemos gente de Pehuajó, Urdampilleta, Olavarría, Bragado que pasan por Bolívar y llegan a Camarón Bubba, hemos hecho varias paellas en eventos de Daireaux”.

 

Contacto:

Dirección: Lavalle 474

Teléfono: 15442264

Facebook: Camarón Bubba

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Ciudad de Bolívar - Provincia de Buenos Aires - Argentina - Año 2014

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