Mujeres de trabajo

 

En el mes de la mujer cabe reflexionar acerca de las conquistas aún pendientes del género. Considerando los inmensos avances que ha tenido la mujer en el mundo laboral, aún enfrentan desigualdades importantes en ese ámbito.

En el mundo, solamente el 13% de las empresas medianas y grandes son dirigidas por mujeres, tal como reconoce la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Ello es una evidencia de las dificultades que representa acceder a cargos directivos, aún con similar o superior formación que sus pares varones.

A las mujeres les cuesta llegar a la cima. La experta argentina en relaciones laborales, Brenda Barán da cuenta que en 2014, solamente el 20% de las colocaciones de la consultora que dirige se realizó en mujeres, la mayoría en el área de Recursos Humanos.

No es una cuestión de formación, ya que el 55% de los doctorados a nivel mundial está representado por mujeres. En Argentina, el 54% de las personas con estudios universitarios completos, son mujeres.

En nuestro país, el 52,7% de las mujeres que accedió a puestos directivos, tiene estudios superiores o universitarios. En los hombres, solamente el 34,6% requirió esa formación para acceder a un puesto de privilegio.

Un impedimento claro: las mujeres encuentran dificultades para adquirir experiencias en cargos de gestión, requisito indispensable para seguir ascendiendo. También existe una restricción por especialidades, donde mejor se posiciona a la mujer es en recursos humanos, relaciones públicas, comunicación, finanzas y administración.

Es en las pequeñas empresas donde se potencia la posibilidad de ellas, y ello es porque existen estructuras y modalidades laborales más flexibles.

Otro obstáculo es cultural. Se las vincula a determinados prejuicios, se privan algunos trabajos, se las responsabiliza de tareas hogareñas y familiares, etc.