Fusión, fuerza creativa

Compartir espacios, ideas y energías es una tendencia que crece. Dos actividades encontraron en el Paseo Tinelli la coexistencia para fortalecerse mutuamente.

 

Arte, aromas, terapia, reflexología y productos de calidad se combinan en este nuevo espacio en Bolívar.

Mónica Rodríguez y Gladis Gamarra llegaron desde Buenos Aires hace dos meses, se conocieron en esta ciudad y el 1 de agosto, día de la Pachamama inauguraron “Fusión” un espacio para estar bien.

Mónica es artista plástica y da clases de arte, Gladis es reflexóloga holística y ambas se asociaron para crear una terapia diversa y complementaria a la convencional, “si bien hacemos cosas distintas nos pareció que podíamos combinar nuestras actividades”, coinciden.

El inicio de este proyecto emprendedor tuvo un origen casual y familiar. “El momento en que surgió esto fue de nuestros esposos porque, como cada una viaja a Capital por trabajos que todavía sostenemos y nos dedicamos a profesiones distintas, no se nos había ocurrido hasta que ellos sugirieron la idea. Surgió en un asado y ellos nos dieron el apoyo económico para empezar, querían que compartiéramos las raíces que ellos están teniendo acá en Bolívar”, recuerda Gladis.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Enseguida, ellas supieron que en realidad estaban poniendo en palabras un deseo que, sin pensarlo racionalmente, podía hacerse realidad. “Nos parece importante tener un espacio juntas, estábamos haciendo nuestras actividades en cada una de nuestras casas y en Bolívar no nos conocen, más que repartir un volante o hacer publicidad no podíamos hacer para visibilizarnos, así que nos gusta este lugar. Además nos interesa que vean lo que hacemos y los elementos que se pueden encontrar acá”, comenta Mónica. En este sentido, en “Fusión” se ofrece una amplia gama de productos que ayudan al bienestar personal: velas, lámparas de sal, cuadros, artesanías, objetos de decoración y aromaterapia. Los aromas son de la marca Universo Garden Angel, marca de origen argentino que se dedica tanto a lo corporal como ambiental. En la línea de esta marca se encuentran esencias, cremas, aromatizadores ambientales, óleos, entre otros productos naturales.

 

Sobre el nombre Fusión,Mónica comenta “buscamos una palabra que uniera dos actividades que a simple vista no se parecen pero que al final tenían algo en común”. Se trata no sólo de una etiqueta, sino de un conjunto de valores que las representa, Gladis agrega: “Fusión es terapia, aromas, es lo que ves cuando entras al local, lo que se huele y lo que se siente. Estamos usando sales del Himalaya que ionizan y limpian los ambientes, olores de velas, esencias y aromatizadores, colores, el arte es terapia y la reflexología específicamente también”. 

 

“La reflexología holística que acá se practica es una técnica milenaria, de origen oriental, específicamente chino, que se basa en los pies y en las manos. Allí se encuentran las terminaciones nerviosas y también las zonas reflejas del cuerpo físico, de ahí el nombre reflexo”, definen. Es una terapia holística porque no sólo aborda lo físico y orgánico sino también y especialmente, lo emocional del ser humano”, la mirada como terapeuta holística no es la de ver un ataque de hígado por la milanesa que te comiste, sino tratar de llegar a aquellas emociones que te llevaron a tener un ataque de hígado”, explica Gladis.

Se trata de un tratamiento complementario a la alopatía, homeopatía y medicina china. “Vos podés estar en tratamiento de cualquier enfermedad, siempre y cuando la persona esté abierta, dispuesta y cómoda con el terapeuta, no obstruye lo que está atravesando por participar de este tipo de terapias”, agrega la reflexóloga.

“No somos sanadores sino que acompañamos al otro a que mueva sus energías para lograr equilibrio y bienestar”, aclara Gladis. La reflexología trata problemáticas como insomnios, contracturas, diabetes, estrés, problemas urinarios, problemas digestivos, problemas del esqueleto y demás. El esqueleto, según Gladis, es el órgano más profundo y el que tiene dolencias por las cargas que lleva la persona y que, muchas veces, son de índole emocional. “Desde mi pequeño lugar, con 20 años en esta profesión, trato de llevar a la persona a sentirse a sí misma, a conocerse y a un mejor estilo de vida”, resume.

Las clases de arte también emprenden esta misión de ofrecer alternativas para lograr un bienestar. Mónica, de su parte, sostiene que “mucha gente busca hacer algo por sí misma, un espacio propio, o simplemente hacer algo que quería desde hace tiempo y se encuentra ahora con más tiempo para realizar esa asignatura pendiente. También pueden llegar por recomendación de profesionales, hacer algo que te gusta y te desestresa”.

Gladis coincide con su compañera en que todo lo que proponen en Fusión se alinea en la terapia: “El arte es terapéutico porque te hace conectarte con vos mismo, te hace pensar en un mundo en que estamos todos automatizados, te pide que te concentres en la técnica, en la acción y el movimiento de manejar la muñeca, por ejemplo”.

Es importante destacar que toda persona con ganas de aprender y expresarse puede sumarse a las clases de arte. “Es muy lindo ver cómo hay personas que pensaban que no podían realizar determinadas obras y con una guía adecuada finalmente pueden hacer algo hermoso. No es necesario el talento o la formación artística desde chicos, de acuerdo a la personalidad de cada uno se puede encontrar una técnica específica”. Mónica propone un taller donde profesora y alumnos/as se tratan de manera horizontal y donde cada persona tiene su propia técnica y tiempo, es decir, no trabajan todos al mismo ritmo sino que se respetan las particularidades de cada uno.

En Fusión entonces, el arte y la reflexología se fusionan para hacer de la terapia una expresión real y posibilitar una mejor calidad de vida. La decisión de recibirlo, es el primer paso.

 

Dirección: Alvear 45

Teléfono: 2314-415055