Cámara Comercial

Tecno polo: el capital cognitivo como desarrollo

Federico Berón coordina la convocatoria institucional de personas involucradas a la tecnología informática a fin de impulsar encuentros, capacitaciones, vinculaciones empresarias, colaboraciones y fuentes de trabajo.

 

Federico Berón es especialista informático, docente, integrante de la Comisión Directiva de la Cámara Comercial y la Subcomisión de Jóvenes de la misma. Meses atrás la organización tuvo un nuevo gesto de visión estratégica al convocar a todas aquellas personas vinculadas al área y generar un espacio original para desarrollar e impulsar el capital cognitivo que contribuya a la iniciativa municipal del denominado Polo Tecnológico.

Egresado de la UTN de Córdoba, donde está uno de los polos tecnológicos más grandes, junto a Tandil y Buenos Aires, Berón explica que allí “fui viendo cómo crecía eso, y lo sigue haciendo, porque eso no para nunca”. Ya en Bolívar, como docente en el Instituto 27, en la carrera de Analista de Sistemas, propuso “juntarnos para trabajar con los chicos y hacer sinergia entre todos, sobre todo para hacer capacitaciones, porque lo que es tecnología va cambiando y requiere actualización constante”.

“El año pasado junto a la gente de la Cámara se propuso el armado de este tecno polo –relata- para organizar capacitaciones o charlas; el punto es juntarnos con toda la gente que se dedica a las tecnologías de información. Hay distintos roles en las TI, por lo que la idea es ir mencionándolas a los participantes, y quienes no pudieron o quisieron ir a estudiar a otros lugares, podamos proponerles estos nuevos roles y certificaciones de los mismos, de manera de profesionalizar más”. A modo de ejemplo enumera que “el rol más reconocido es el de desarrollador de software, diseñador UX (experiencia del usuario, que sea sencillo para manejar una página), el texting de software, gestión de proyectos, es mucho más que desarrollar una página web, hay un sinfín de posibilidades”.

En noviembre comenzamos con la convocatoria del primer encuentro, “a todos los que se dedicaran a TI o que estuvieran interesados, es decir técnicos o comercios que quisieran digitalizar los procesos de su negocio (vender por un canal digital), juntarnos para ver entre todos cómo proponer esas cosas. Ya sabíamos que había mucha gente dispersa en el partido de Bolívar, y superamos ampliamente la expectativa”, afirma.

Recientemente hubo un nuevo encuentro, “una charla que realizó Josefina Tous Bercovich acerca de cómo trabajar los fracasos, cómo manejar la frustración”. Ahora hay un nuevo encuentro, “ya con una temática muy técnica, el RPA, que estará a cargo de Jorge Sardón, un bolivarense que está trabajando en una empresa muy importante en Tandil”. Asimismo, ya está pensado el evento siguiente, “que será sobre big data (inteligencia artificial) y bitcoins (monedas digitales)”.

 

Desde lo institucional expone que “desde la Cámara solamente estamos intentando mostrar lo que está afuera, tratando de impulsar la conexión entre los polos tecnológicos que ya están desarrollado y quienes están acá sin saber muy bien qué destino darle a sus estudios o cómo hacer lo que les interesa”.

Al momento de proyectar un futuro, vale soñar la explosión de un capital cognitivo colaborativo que pueda generar un auténtico desarrollo local vinculado a la formalidad del polo tecnológico municipal. Berón interpretó que “al momento de pensar en un lugar para desarrollar, una construcción que aún está en progreso, pensamos que eso era un acierto del municipio, es estar alineados con el resto. Pero por otro lado está la gente, la proactividad, nos van a poner un edificio, ¿pero qué estamos haciendo, vamos a estar preparados y organizados para cuando esto termine? Los polos tecnológicos no tienen que ver con instituciones o edificios, sino con la atmósfera que se vive en la ciudad, con los jóvenes trabajando en tecnología, gente hablando de tecnología, conectados con el mundo y con todo lo que tiene que ver con el desarrollo del software y todo su entorno”. Eso lleva a pensar en un cambio radical en la concepción industrial acerca del gran edificio fabril, el producto físico terminado y el ideal histórico de progreso. Berón entiende que “el lugar físico sirve para juntarnos todos ahí, el lugar del encuentro, pero una ciudad se desarrolla tecnológicamente cuando todos comienzan a hablar de tecnología, porque un edificio vacío no hace a un polo tecnológico”.

Cuando comienza a evaluar esas potencialidades, subraya que “una de las cuestiones que me llamó la atención es que hay mucha gente de Bolívar ocupando espacios muy importantes en grandes empresas del rubro, algo que fuimos descubriendo en las conversaciones con uno y otro. Esto fue una grata sorpresa, ya han venido al segundo encuentro y pudieron contar sus experiencias, lo cual resulta muy importante para los que se están iniciando, y así poder observar distintas perspectivas y campos de acción”. Esa conexión entre personas es uno de los logros que destaca el organizador, “gente que no se conocía, y eso contribuye al progreso del lugar, sean posiciones laborales como el vínculo con empresas para que vengan a desarrollarse aquí. Cabe puntualizar que en tecnología no es necesario el vínculo físico, se trabaja desde el hogar hasta cumplir los objetivos” pautados por la empresa.

 

En cuanto al escenario futuro, “el ideal es hacer de Bolívar un lugar que entre en el proceso de desarrollo tecnológico. Lo más importante es generar puestos de trabajo tecnológicos, ya que aquí no hay muchas vacantes, y lo otro es trabajar de lo que a uno le gusta; que un pibe esté trabajando donde no es feliz estamos perdiendo una oportunidad. Creo que en el desarrollo de software, donde se usan muchos algoritmos, mucha lógica, los pibes están muy cómodos, por lo que también se trataría de encontrar la posición ideal para cualquier persona que quiera desarrollar. Esto crece constantemente, una vez que logremos eso, veremos hasta dónde se puede llegar, que después de la conexión con otros polos tecnológicos, puede llegar muy lejos”.

En relación a los diagnósticos, visualizada la cantidad de gente que está trabajando en el tema, queda definir elementos sustanciales como la formación y los vínculos institucionales. Berón interpreta que “en todo la capacitación, la educación, es lo más importante. Hay una tecnicatura que viene de Tandil, la TUDAI, que se hizo a ciclo cerrado, y hoy está terminando el tercer año, ya sin nuevos inscriptos, por lo cual es una pena. En cuanto al Instituto 27 hemos conversado acerca de contar con una carrera vinculada para el año que viene. En éste año en el Centro de Formación Profesional 401 vamos a conversar un curso en marzo sobre soluciones informáticas, que tiene que ver con programación; creo que en el 402 también quedó algo de multimedial. La realidad es que hoy en educación no estamos invirtiendo todas las energías en éste foco, porque necesitamos capacitarnos mucho”.

Sobre los recursos que ya están trabajando en el distrito, Berón observa que se “hallan en un nivel training, entrenamiento puede decirse, para que dentro de un año puedan estar capacitados para un trabajo individual. En tecnología hay distintas categorías como junior, semi senior y senior; la mayoría está en el primer nivel, se evalúan por conocimientos que se desenvuelven individualmente. Lo importante es que estamos en movimiento, con la Cámara acompañando e impulsando una movida de gente que ya está trabajando”, analiza.

En cuanto al acontecimiento de encontrarse con otros, también sirve para reforzar la idea del trabajo colaborativo en el que los informáticos son adeptos y que los más jóvenes impulsan tempranamente a partir de prácticas como juegos virtuales. Berón analiza “esa idea de que las personas que trabajamos con computadoras parecemos solitarios, quizás tenga que ver con que necesitamos mucha concentración”, sin embargo “las ganas de juntarse para compartir información, experiencias y ayudarse existe constantemente, hay lugares –foros- en los que permanentemente intercambiamos opiniones; eso quedó visto en el primer encuentro, esperábamos menos de veinte personas y llegaron unos 45, y sigue creciendo el número de interesados. La idea de estar conectados, siempre está”.

Justamente, en tanto la industria del juego/entretenimiento ha cambiado formas de socialización, también se ha convertido en una forma de pensar, interactuar en distintos idiomas y establecer estrategias. En ello también el sistema educativo pone el ojo acerca de las nuevas lecturas y formas de acceder al conocimiento que tienen los jóvenes. Asimismo se han transformado en un enorme impulsor de la economía, generando ganancias por más de USD 152.000 millones en el mundo, unos USD 60 millones en la Argentina.

A fin de concretar contactos e inquietudes, Berón pide a los interesados se acerquen a la Cámara para poder establecer los vínculos para mantener conexiones. Los nuevos encuentros se promocionarán a través de la página institucional y sus redes sociales. Finalmente convoca a todos, “grandes, chicos, avanzados o iniciados, sin importar el género, o aquellos que tengan algún interés en digitalizar sus comercios, no duden en concurrir a la institución, porque nosotros estamos trabajando en formas de colaboración para conectarnos con el mundo”.