top of page

Al traste con lo divino

Por Verónica Ruiz

 

En esta sección viajamos buceando en distintos aspectos del emprendedor, con una mirada abierta en cuanto a lo que generalmente se le infiere o atribuye conceptualmente a quien realiza la actividad de emprender.  Hoy vamos a jugar con los instrumentos. ¿Quién no necesita de ellos para la acción? ¿Abrimos el trastero, ese espacio en vos que guarda los instrumentos más nobles?
Un instrumento es considerado una herramienta para canalizar mediante su uso,  una acción laboral o artística, que unida a otra cosa, crea un objeto o servicio.  Así es por definición, y cada definición plantea varios debates, el primero sería: es que esta apreciación presume que lo laboral no es artístico o que el arte no es trabajo?! Uff… ¿Cómo nos distraen los conceptos no? …y nos encasillan conductualmente. ¿Cuántas cosas quedan afuera de las definiciones y cuántas posibilidades quedan excluidas de nuestro cerebro por tener mero conocimiento teórico. Por eso el valor reside en la acción concreta de esos conceptos, echarlos a andar!! Ahí surge el conocimiento vivencial y aparece Dios obrando a escondidas. Debería considerarse la voz, como el instrumento primero, ya que no hubo necesidad de crearlo, y eso lo vuelve especialmente misterioso. Y como todo misterio se lo deja mágicamente en el closet sin agregarle valor ya que esta ahí desde siempre… sin embargo, hay una mirada expandida que recoge lo sutil y lo lleva a la materia!!! Lo revive, le da valor y un lugar… esa mirada es propia del emprendedor! Resignificar los sentidos y saberlos herramientas, sino, ¿qué sería de los instrumentos sin la esencia?
¿Quién podría creer que una maza, un ladrillo, el violín, la tijera, un papel, el telescopio, una tiza, el jabón, un coche, una idea…, incluso mis manos, hiciesen algo por si solos. Empezando por lo básico: todo lo que fue creado fue pensado, en tanto que, una idea no es menor que un museo, sin una, la otra no existiría.
El primer instrumento del emprendedor es su SER, es la morada donde da lugar a su idea, se sabe equipado de sus sentidos, ve-mirando, escucha-oyendo, huele… saborea… Toca y expresa su idea!!! Es como reconocer el aérea, reconoce primero sus recursos, los que le son genuinos, los propios!  Desde esta base se recrea una y otra vez junto a la obra.
Sino existe este reconocimiento, creerá que todo está allá afuera, y saldrá al  mercado en busca de ellos. La tecnología y la ciencia tienen alma, sino sabemos ver esto, nada mágico saldrá de nosotros. Es curioso cómo vemos la máquina y no al operario, este teclado, el papel donde se imprimirá esta nota, la imprenta, las máquinas, la distribución, todo!! Ha sido pensado a partir del ser íntegro que habita en uno… 
Ahora mismo podrías colocar tu dedo índice sobre la muñeca y sentir el latido de tu corazón. ¿De dónde viene? ¿Qué lo origina? ¿Cómo no se detiene? ¿Qué es lo que lo mantiene ahí? ¿Hay una maquina operando a este corazón? 
Hay un instrumento superior que nos da origen… y el emprendedor, reconoce ese pulso universal y da lugar a la creación.  Co-crea con sus instrumentos naturales, una idea de negocio, un sueño, un proyecto, una idea que jamás será sin él! Con una voz única que le da su sello, con sus manos como firma certificada, y su mirada exclusiva que le da identidad, que lo CONFUNDE (funde-con) la obra y juntos, en una perfecta sinergia salen al mundo exterior.
Somos un instrumento perfectamente aceitado, cuando nos sabemos UNO con el todo, y nos prestamos amorosamente para ser utilizado por Dios.
San Francisco de Asís le pidió ser su instrumento de paz, yo le he pedido a algún Dios ser su instrumento vital para lo que requiera, ¿vos, ya sos instrumento divino de la creación? ¿O aún duermes en alguna trastería social?

  • Wix Facebook page
  • Wix Twitter page

Ciudad de Bolívar - Provincia de Buenos Aires - Argentina - Año 2014

bottom of page