Con-Ciencia en calzados

 

La fábrica local consolida su espacio. Como emprendimiento familiar se afirman en Bolívar y crecen en la región. Elba Criado: "no hay que darse por vencido"

 

Un capital tan valioso como el conocimiento, en poder de Elba Criado, se convirtió en una empresa familiar que hoy abastece a Bolívar y la zona con calzados de alta calidad.

 

Con-Ciencia es una fábrica de calzados de Bolívar que produce y vende no sólo un producto cien por ciento local sino además, de excelente calidad y buen precio. La premisa con que se trabaja desde la producción está basada en la comodidad, es decir, todo lo que se allí se fabrica está destinado al confort de los clientes. Los calzados que llevan la marca Con-Ciencia son alpargatas reforzadas, alpargatas con cordón básicas en negro, blanco, azul y verde, otras con diseño en diferentes estampas, chatitas y panchas para dama, niños y adultos. En la fábrica se vende tanto al por mayor como por unidades, es decir, se distribuye a diferentes comercios y a su vez la misma atiende directamente al cliente.

 

Los inicios

La fábrica de calzados Con-Ciencia es un emprendimiento familiar que tuvo su origen hace ocho años. Elba Criado, cuenta que junto a su marido y sus hijos reunieron gente entendida en el trabajo de confeccionar calzado para comenzar esa aventura que hoy es el motor de su familia. “En ese momento pude armar un conjunto de chicos y chicas con experiencia que todavía son parte de la fábrica”, sostiene. Lo que comenzó con la producción de un producto básico y único, alpargatas reforzadas, pronto fue ampliando su abanico de ofertas hasta satisfacer, en la actualidad, aun gran mercado.

La capacitación previa al montado de la fábrica resulta fundamental, como en muchos emprendimientos en general, para lograr un buen producto final listo para poner a la venta. Entonces, cerca de 2007 se dictaban en la ciudad diversos cursos de rápida salida laboral entre los cuales se encontraba el de aparado de calzado. “Empecé los cursos porque mi marido se había quedado sin trabajo y se me ocurrió que podía ser una buena alternativa para los dos”, recuerda Elba. La primera propuesta de trabajo para ella en esta área, tuvo lugar en uno de los talleres que le habían enseñado a ella misma el oficio. Luego trabajó durante cinco años en una fábrica de calzados, proveniente de Saladillo, y allí adquirió con mayor facilidad y seguridad las técnicas de confección de zapatillas. En ese momento surgió la venta de una fábrica de calzados que marcó un antes y un después en la vida de la familia Vicente Criado. “A pesar de que había capacitación de mi parte teníamos miedos e inseguridades de que no nos saliera todo bien con el calzado. Queríamos hacer muchas unidades en poco tiempo y a su vez con buena calidad. Nos llevó casi un año tener total confianza en nuestro trabajo”, confiesa la propietaria.

 

Tiempo de crecer

El comienzo de un emprendimiento suele tener algunos obstáculos a superar que luego definen el tipo de producto que se ofrece y el vínculo que se establece con el cliente. La fábrica Con-Ciencia lanzó sus productos a los comercios y público en general sin ningún tipo de garantía respecto de su recepción. “Cuando comenzamos había marcas impuestas de alpargatas, pero pudimos hacernos conocer ofreciendo buena calidad y bajo costo. Hoy podríamos decir que somos una marca impuesta en Bolívar”, comenta Elba. A esta inclusión en el mercado local le siguió una ampliación de demanda en la región: el calzado de Con- Ciencia se vende ahora en Huanguelén, Olavarría y Azul.

Una vez que la fabricación de calzados tomó un ritmo productivo y las alpargatas reforzadas tenían buena recepción por parte de los clientes, sobre todo para trabajo de campo, la familia propietaria se animó a incursionar en nuevos tipos de calzado. “Cuando se incorporó Silvina a la fábrica, que es muy entendida en el tema, decidimos probar con otros productos que hasta entonces no habíamos hecho”, recuerda Elba. Entonces comenzaron a producir zapatillas y panchas. Actualmente se venden también alpargatas para niños, alpargatas con cordón con diseños varios y chatitas para mujeres.

 

El equipo de trabajo

Si bien la fábrica es una empresa familiar, Elba, su marido y sus hijos son quienes se ocupan en gran parte del trabajo, existe un grupo de personas que completan el equipo laboral. “Siempre apunté a que la persona que se fue incorporando a la fábrica se sume al compañerismo y buen trato entre todos, sin esto no hay buen producto. Lo mismo se aplica para mis hijos, acá no hay diferencias”, dice Elba.

En la parte de armado, Renso y Diego son los encargados. Melany se ocupa del control de calidad. En la mesa de trabajo y como mano derecha de Elba se encuentra Silvina, que cuenta con la reciente incorporación de Sandra. En el aparado y costura se destaca el trabajo de Marcelo. En esta misma área trabajan personas de manera independiente, es decir, desde su casa. Se trata, entonces, de una empresa con elaboración local que no sólo ingresa al mercado de Bolívar sus productos sino que también ofrece salida laboral a varios trabajadores de la ciudad.

A la hora de elaborar un calzado nuevo o de innovar en el diseño la decisión se toma entre todos, teniendo en cuenta tanto la opinión de la familia como la de los empleados, “hacemos una consulta entre los que componemos el calzado y proponemos diferentes ideas”.

 

Con-Ciencia

La fábrica tiene nombre propio, aquel que le da identidad y le permite reconocerse en un mercado amplio tanto de calzados como de otros productos. Elba cuenta cómo surgió esa identificación y cuáles fueron los motivos: “la elección del nombre fue de mi hermano. En realidad a él le gustaba la palabra conciencia y luego yo le agregué el guión que separa al medio: con-ciencia. Esto es porque desde el principio tuvimos conciencia de lo que íbamos a hacer y trabajamos sabiendo qué producto queremos vender, a qué queremos apuntar y lo hacemos con algo de ciencia, ya que tuvimos que capacitarnos y aprender para poder fabricar”. Además, el logo que identifica a la empresa es una bandera argentina que en lugar del sol, en el medio, tiene en color amarillo la figura del partido de Bolívar. Esto permite, si el cliente pone atención en la imagen, que se conozca desde el producto mismo, que está elaborado en la localidad.

 

Un estilo de vida

Tanto para Elba como para su familia, la fábrica constituye uno de los elementos más importantes de su vida. Aquella que se lleva gran parte de su tiempo y dedicación, también aquella que les otorga frustraciones y satisfacciones con la misma facilidad. “Me gusta venir todos los días a la fábrica y eso lo sé desde que empecé con los cursos de calzado. Lo que más me motiva es poder crear nuevos calzados, diseñar con colores, rayas, estampas que se ven bien. A todo lo que hago en mi vida le pongo el alma”, confiesa Elba.

Al ingresar al lugar es evidente que quienes se mueven allí diariamente se lo apropian como si fuera su segundo hogar. Allí conversan, toman mate, comen torta y establecen lazos de amistad. También es notable que la pasión que le pone Elba a su trabajo se contagia en los empleados y en el respeto que se tienen tanto entre compañeros como hacia los clientes. “Yo me levanto todos los días porque sé que esto no lo puedo dejar venir abajo, por mí pero más aún porque acá hay personas que dependen de este trabajo y ellos tienen mi palabra, eso es muy importante. Además tengo el compromiso de cumplir con los clientes”, admite Elba.

Si bien sus propietarios no imaginaban en un principio que la fábrica llegaría a crecer tanto, ahora se sienten en condiciones de soñarla un poco más grande de lo que ya es. Tal es así que Elba confiesa que a futuro le gustaría: “poder distribuir los productos en más lugares, de a poco crear calzado más elaborado y que el día de mañana mis hijos continúen con esto”.

Compartir la experiencia de comercialización y emprendimiento de la fábrica Con-Ciencia puede ser de gran utilidad para quienes se encuentran con algún capital, ya sea económico o de conocimiento, disponible para comenzar algo nuevo. La enseñanza que presenta el caso de Elba y su familia es muy clara: “no hay que darse por vencido ante cualquier contratiempo que aparezca. Además es importante encontrar gente que te acompañe, que trabaje a la par tuya sin dejarse llevar por algunos problemas. Todo se logra con sacrificio, si a lo que emprendes le pones continuidad y compromiso va afuncionar bien”.

 

Contacto:
concienciacalzados@hotmail.com.ar
General Paz 250 - Bolívar - 02314 413302
Facebook: Con-ciencia Calzados